¿Sabías que el primer ser vivo que orbitó la Tierra no fue un humano, sino una perra? Su nombre era Laika, y su historia es una de las más fascinantes y trágicas de la carrera espacial. En este artículo te contamos cómo fue su vida, su viaje y su legado.
¿Quién era Laika?
Laika era una perra callejera que fue encontrada en las calles de Moscú en 1954. Tenía un pelaje blanco y negro, y era de tamaño mediano. Se cree que era una mestiza de la raza laika, que son perros de caza originarios de Rusia. Laika fue seleccionada por el programa espacial soviético para ser la tripulante de la nave Sputnik 2, que se lanzaría al espacio el 3 de noviembre de 1957. Antes de su misión, Laika fue entrenada con otros dos perros, Albina y Mushka, para soportar las condiciones extremas del vuelo espacial. Los científicos le pusieron un arnés especial, le implantaron sensores para medir sus signos vitales, y le enseñaron a comer comida en gel. Laika fue elegida por su temperamento tranquilo y su resistencia física.
¿Cómo fue su viaje al espacio?
El 3 de noviembre de 1957, Laika fue colocada en una cápsula dentro de la nave Sputnik 2. La nave tenía forma de cono, y medía unos 4 metros de alto y 2 metros de diámetro. La cápsula de Laika tenía unos 80 centímetros de largo y 60 de ancho, y estaba equipada con un sistema de soporte vital, una cámara de televisión, un ventilador, un calentador y un dispensador de comida y agua. La nave despegó desde el cosmódromo de Baikonur, en Kazajistán, y entró en órbita alrededor de la Tierra a una altura de unos 200 kilómetros. Laika se convirtió así en el primer ser vivo terrestre en orbitar la Tierra, un mes después de que el primer satélite artificial, el Sputnik 1, lo hiciera. La hazaña de Laika causó una gran impresión en el mundo, y demostró que era posible sobrevivir en el espacio.
¿Qué le pasó a Laika?
Lamentablemente, Laika no sobrevivió a su viaje al espacio. Los científicos sabían que no había forma de traerla de vuelta, y que moriría en el espacio. Sin embargo, no revelaron la verdadera causa y el momento de su muerte hasta muchos años después. Inicialmente, se dijo que Laika había vivido unos seis días en el espacio, y que había sido sacrificada con una inyección antes de que se acabara el oxígeno. Pero en 2002, se supo que Laika había muerto pocas horas después del lanzamiento, debido al sobrecalentamiento de la nave, causado por un fallo en el sistema térmico. Laika sufrió estrés y pánico, y su corazón se aceleró hasta el doble de lo normal. Su temperatura corporal se elevó hasta los 41 grados, y murió por un golpe de calor. La nave Sputnik 2 siguió orbitando la Tierra con el cuerpo de Laika hasta el 14 de abril de 1958, cuando se desintegró al reingresar en la atmósfera.
¿Qué significó Laika para la ciencia y la humanidad?
Laika fue una heroína de cuatro patas que sacrificó su vida por la ciencia y la exploración espacial. Su misión proporcionó datos valiosos sobre cómo los organismos vivos reaccionan a los entornos de los vuelos espaciales, y abrió el camino para los vuelos espaciales humanos. El primer humano en el espacio, Yuri Gagarin, reconoció la deuda que tenía con Laika, y dijo: “Laika fue la primera pasajera del cosmos, y abrió el camino para nosotros”. Laika también inspiró a muchos artistas, escritores y músicos, que le dedicaron obras de arte, libros, canciones y películas. Laika fue homenajeada con varios monumentos, sellos y medallas, y se convirtió en un símbolo de la lealtad, el valor y el sacrificio. Laika también despertó la conciencia sobre el trato ético de los animales, y motivó a que se establecieran normas y regulaciones para proteger a los animales utilizados en experimentos científicos.
La historia de Laika es una de las más conmovedoras y trágicas de la carrera espacial. Laika fue una perra callejera que se convirtió en la primera astronauta de la Tierra, y que pagó ese indeseado honor con su vida. Laika nos enseñó que el espacio es un lugar fascinante, pero también peligroso, y que debemos respetar y cuidar a todos los seres vivos que lo habitan.
