¿Te imaginas que tu perro pudiera avisarte de que tienes una enfermedad antes de que tú mismo te dieras cuenta? Pues no es ciencia ficción, sino una realidad. Los perros tienen un olfato tan desarrollado que pueden detectar cambios químicos en nuestro cuerpo que indican la presencia de diversas enfermedades. En este artículo te contamos qué enfermedades pueden detectar los perros, cómo se entrenan para hacerlo y qué beneficios tiene para la salud humana.
¿Cómo pueden los perros detectar enfermedades?
Los perros tienen alrededor de 300 millones de receptores olfativos, frente a los 5 millones que tenemos los humanos. Esto significa que pueden oler cosas que nosotros ni siquiera podemos imaginar, como las emociones, el miedo o el estrés. Pero también pueden oler las enfermedades, ya que estas producen cambios en los compuestos orgánicos volátiles (COV) que liberamos a través del aliento, el sudor, la orina o las heces. Los perros pueden detectar estos cambios y asociarlos con una enfermedad específica, gracias a su memoria olfativa y a su entrenamiento.
¿Qué enfermedades pueden detectar los perros?
Los perros pueden detectar una gran variedad de enfermedades, tanto infecciosas como crónicas, que afectan a diferentes órganos y sistemas del cuerpo humano. Algunas de las más destacadas son:
- Cáncer: los perros pueden detectar diferentes tipos de cáncer, como el de piel, el de mama, el de próstata o el de pulmón, al oler las muestras de tejido, sangre, orina o aliento de las personas afectadas. Los perros pueden detectar el cáncer en etapas tempranas, lo que puede mejorar el pronóstico y el tratamiento de la enfermedad.
- Diabetes: los perros pueden detectar la hipoglucemia, es decir, el descenso de los niveles de azúcar en sangre, al oler el aliento o el sudor de las personas diabéticas. Los perros pueden alertar a sus dueños o a sus cuidadores de que necesitan tomar algún alimento o medicamento para evitar una crisis hipoglucémica.
- Malaria: los perros pueden detectar la malaria, una enfermedad infecciosa transmitida por mosquitos, al oler los calcetines usados por las personas infectadas por el parásito. Los perros pueden identificar la malaria con una precisión de hasta el 70%, lo que podría ayudar a prevenir y controlar la enfermedad en zonas endémicas.
- Parkinson: los perros pueden detectar el parkinson, una enfermedad neurodegenerativa que afecta al movimiento y al equilibrio, al oler la piel de las personas que la padecen. Los perros pueden detectar el parkinson antes de que aparezcan los síntomas motores, lo que podría facilitar el diagnóstico precoz y el tratamiento de la enfermedad.
- Narcolepsia: los perros pueden detectar la narcolepsia, una enfermedad que provoca somnolencia excesiva y ataques de sueño repentinos, al oler el sudor de las personas que la sufren. Los perros pueden prevenir y responder a los ataques de narcolepsia, colocándose en el regazo de la persona o buscando ayuda.
¿Qué beneficios tiene que los perros puedan detectar enfermedades?
Que los perros puedan detectar enfermedades tiene múltiples beneficios para la salud humana, tanto a nivel individual como colectivo. Algunos de estos beneficios son:
- Mejorar la calidad de vida de las personas con enfermedades crónicas, al proporcionarles apoyo, seguridad y compañía.
- Prevenir complicaciones y emergencias médicas, al alertar de posibles crisis o episodios graves.
- Facilitar el diagnóstico precoz y el tratamiento de las enfermedades, al detectarlas en etapas tempranas o incluso antes de que se manifiesten los síntomas.
- Reducir los costes sanitarios, al evitar pruebas invasivas, hospitalizaciones o intervenciones quirúrgicas.
- Contribuir a la investigación y la prevención de las enfermedades, al proporcionar información valiosa sobre los biomarcadores y los factores de riesgo.
Los perros que pueden detectar enfermedades son unos verdaderos héroes de cuatro patas, que nos demuestran una vez más su inteligencia, su lealtad y su amor incondicional. Su olfato es una herramienta poderosa que puede salvar vidas y mejorar la salud de muchas personas. Por eso, debemos cuidarlos y respetarlos como se merecen.
